Desde 1939
La construcción de vehículos de aluminio de alta calidad siempre ha sido nuestra especialidad. No fue necesario mucho tiempo para que nuestros productos se exportaran por todo el mundo.
Todo comenzó con la conversión de automóviles americanos en ambulancias y camiones de bomberos. Más tarde la compañía también construyó autocares.
Ya entonces el fabricante de teleféricos Gerhard Müller confió en los conocimientos de CWA en la construcción de aluminio ligero y contrató a la compañía para la primera cabina de teleféricos.
Como una excepción, CWA construye con éxito una nave, la “Aurora”, que aún hoy continúa navegando en el lago Lucerna.
CWA comenzó a especializarse cada vez más en la construcción de vehículos para teleféricos. En 1964 las primeras cabinas de teleféricos para clientes extranjeros fueron a Sandia Peak en Nuevo México, EE.UU. con capacidad para 60 pasajeros.
En el mismo año se construye el primer funicular autoportante para la instalación de Chantarella-Corviglia en St. Moritz.
CWA suministra los primeros trenes para el prometedor sistema monorraíl en la Exposición Internacional de Transporte de Múnich.
Sale de la fábrica la primera telecabina con acristalamiento panorámico.
Las cabinas CWA van a Mellau en Austria, donde Doppelmayr construye la primera telecabina desembragable.
CWA desarrolla las primeras puertas totalmente automáticas para telecabinas y revoluciona el mercado de los teleféricos.
Ese mismo año se utiliza por primera vez un teleférico como medio de transporte público. Con el NOVA Jumbo, CWA gana el concurso por la impresionante instalación que une Manhattan con Roosevelt Island en la ciudad de Nueva York.
Tras un intenso trabajo de desarrollo, CWA obtiene un imprevisto rotundo éxito con el OMEGA. Los fabricantes y operadores de teleféricos la clasifican como la mejor cabina del mercado. CWA es reconocida como líder del mercado.
CWA construye el que entonces fuera el funicular más grande del mundo para la estación de ferrocarril Napoli Centrale en la ciudad italiana de Nápoles. Aún hoy sigue llevando a 450 pasajeros en cada dirección.
ROTAIR, la primera cabina de teleférico del mundo con suelo giratorio fabricada para Titlisbergbahnen en Engelberg, Suiza.
Las cabinas para Yuzawa, Japón, eran tan grandes que ningún medio de transporte podía transportarlas. Así que se construyeron en dos secciones para permitir el envío y luego volver a ensamblarse, una vez en su destino, por profesionales de CWA.
La familia Frech vende la compañía a su principal cliente, el Grupo Doppelmayr.
CWA suministra por primera vez cabinas para norias.
CWA presenta la cuarta generación OMEGA y patenta una estructura de aluminio hecha de elementos extruidos y unidos.
La primera OMEGA IV fue transportada en coche de caballos hasta la cercana Reigoldswil, Suiza.
Entra en servicio en La Paz La primera línea perteneciente a la mayor red de teleféricos urbanos del mundo. La red de transporte público, que llegará a incluir 1.400 cabinas OMEGA, transporta a los pasajeros de forma segura y cómoda sobre los techos de La Paz y El Alto.
Las cabinas de teleféricos más grandes del mundo, cada una con una capacidad para 230 pasajeros, están conectadas al cable de la Bahía de Ha Long Bay, Vietnam. Y este no es el único récord: Con una altura de 188.88 se construyó en hormigón la pilona de teleférico más alta del mundo sobre el mar.
El funicular más empinado del mundo comienza a funcionar en Stoos, Suiza. La pista tiene una inclinación de 110 por ciento. Los pasajeros no sienten los efectos, ya que las cuatro cabinas cilíndricas se mueven automáticamente para compensar las diferencias de inclinación.
Para la quinta generación de este portento teníamos en mente perfeccionar la OMEGA sin compromiso.
Hemos conservado la forma inimitable de la cabina optimizando su estética: vista panorámica, ambiente interior agradable, ergonomía hasta el último detalle y construcción modular, para que la OMEGA V pueda seguir satisfaciendo todas las necesidades de los pasajeros y operadores.
Equilibrada en todos los aspectos en el diseño unificado del grupo Doppelmayr/Garaventa, combina materiales de alta calidad, nuevas tecnologías y una modularidad sin precedentes para una visión inigualable.
Atesora la experiencia de cientos de cabinas 3S que CWA ya ha puesto en servicio en todo el mundo.
Y este año será excepcional: CWA celebra su aniversario, 80 años de experiencia en la construcción de cabinas y vehículos.